Muchas mujeres, cuando se maquillan, dedican casi toda su atención a los labios, los ojos y la piel del rostro olvidando por completo las cejas. Sin embargo podemos sacar mucho partido a nuestras cejas y conseguir una mirada despejada y mucho más bonita y expresiva. A continuación te enseñamos algunos trucos con los que podrás tener unas cejas perfectas.
Definir la línea de nuestras cejas
Lo primero que debemos hacer es definir la línea de nuestras cejas. Cada persona, según sus rasgos faciales, tiene una línea de ceja específica. Lo ideal es respetar esta longitud para conseguir unas cejas que nos favorezcan. ¿Cómo podemos saber dónde empieza y dónde acaba nuestra ceja? Es muy sencillo.
Como muestra el gráfico la ceja tiene 3 puntos: el inicio, la curvatura o punto más alto y el final. Para localizar estos puntos nos serviremos de un lápiz de ojos (si no tenemos ninguno a mano podemos usar un bolígrafo o algún objeto recto de al menos 12 centímetros de largo que utilizaremos como una regla).
A.- Inicio de la ceja
Para saber dónde debe comenzar nuestra ceja cogeremos el lápiz y lo apoyaremos sobre el rostro marcando una línea vertical que va desde la aleta de la nariz hasta el comienzo de la ceja (tal y como muestra el gráfico). Todos los pelitos de la ceja que queden fuera de ese punto (cercanos al entrecejo) los quitaremos con pinzas. De esta manera despejaremos nuestro rostro, definiremos el inicio de la ceja y suavizaremos la mirada.
B.- Curvatura de la ceja
Volvemos a colocar el lápiz sobre el rostro pero en esta ocasión marcaremos una diagonal desde la aleta de la nariz hasta la curvatura (el punto más alto de la ceja). Esta diagonal debe pasar por el borde externo de la pupila o entre la pupila y el iris del ojo.
Hay personas que tienen un ángulo muy marcado y otras un ángulo más suave. No importa. Lo que realmente queremos es localizar este punto y tenerlo en cuenta a la hora de depilarnos y maquillarnos las cejas. Nunca hay que quitar los pelos que marcan esta curvatura. Precisamente este punto es el que dota de personalidad a nuestra mirada.
C.- Final de la ceja
Para saber dónde debe terminar nuestra ceja marcaremos una diagonal con la que alinear la aleta de la nariz con el final de la ceja (como puede verse en el gráfico) y quitaremos con pinzas aquellos pelitos que queden fuera de este punto (es decir, más próximos a la sien).
Con estos sencillos pasos conseguiremos perfilar y definir nuestras cejas haciendo que tengamos una expresión más amable.
Recortar las cejas
Es habitual tener algunos pelitos más largos que otros. Si no los recortamos nuestras cejas quedarán desdibujadas y poco definidas. Para ello necesitamos un peine para cejas y unas tijeras de manicura que emplearemos en dos pasos:
- En primer lugar peinaremos hacia arriba los pelitos de la primera mitad de la ceja (zona comprendida entre los puntos 1 y 2) y recortaremos con unas tijeras de manicura los pelitos que sobresalgan.
- En la segunda mitad de la ceja (zona comprendida entre los puntos 2 y 3) peinaremos los pelitos hacia abajo y repetiremos la acción, es decir, recortaremos con las tijeras los pelos que sobresalgan.
Ahora ya podemos pasar a depilarnos las cejas. Apenas nos llevará unos minutos.
Depilar las cejas
El siguiente paso consiste en depilar nuestras cejas para definirlas, despejarlas y que luzcan más bonitas. Necesitaremos un espejo de aumento y luz natural o luz fría para ver con claridad todos los pelos. Usaremos pinzas de depilar para quitar aquellos pelitos que se salgan de la línea de la ceja que hemos definido en los pasos 1 y 2.
Recomendamos evitar quitarse los pelitos que quedan por encima de las cejas. Lo ideal es depilarnos solo el interior de la línea de la ceja, es decir, la zona comprendida entre la ceja y el ojo. Es importante tener en cuenta que si quitamos pelitos de la parte superior de la ceja esta puede quedar recta, sin su curvatura natural, pudiendo afear nuestra expresión.
Maquillar las cejas
Si nuestras cejas no son muy tupidas (tenemos poco vello) o nuestro tono de pelo es muy claro podemos maquillarlas para que queden más definidas y perfiladas. Esto nos dará una mayor expresividad a la mirada.
El maquillaje también puede ayudarnos a conseguir la longitud deseada si la parte final de nuestras cejas es demasiado corta. Para ello podemos utilizar lápices de varios tonos o en su defecto podemos maquillar nuestras cejas con sombra de ojos. Lo ideal es escoger un color similar al tono del pelo de nuestras cejas para evitar un contraste demasiado fuerte. Solo así conseguiremos que se difumine el color y que las cejas se integren mejor en nuestro rostro.
Recomendamos evitar el color negro porque potencia demasiado los rasgos y endurece la expresión. En su lugar se puede usar un marrón o un gris oscuros. Siempre hay que aplicar el lápiz o la sombra poco a poco, sin salirnos de la línea de la ceja (ni por arriba ni por abajo) y siguiendo el sentido del vello (esto es, desde el inicio de la ceja hacia el final). Iremos dando pequeños toques, como si estuviésemos pintando pelitos, que luego difuminaremos con un pincel de maquillaje, una esponjita o un bastoncillo.
Te sorprenderá el resultado.
¿Dónde puedo encontrar todo lo que necesito para arreglarme las cejas?
Las pinzas, los espejos de aumento y las tijeras de manicura se encuentran con facilidad en droguerías, tiendas de cosmética y en la mayoría de los supermercados. Los peines para cejas, los pinceles y los lápices para maquillar puedes comprarlos en tiendas de cosmética o grandes almacenes (tipo El Corte-Inglés o Amazon) que dispongan de un departamento de belleza.
Con todos estos pasos podrás lucir unas cejas perfectas y conseguir una mayor expresividad en tu rostro. ¡Notarás la diferencia!